Para jugar al nimbi se disponen varias hileras de igual número de cerillas, tantas como se quiera. Por turno, cada jugador puede tomar el número de cerillas consecutivas que quiera. Es decir, no puede tomar ninguna hilera o columna entera, si en ella hay un hueco dejado por otra cerilla retirada previamente. El que retira la última cerilla gana la partida.