Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres (Jean Jacques Rousseau) Libros Clásicos

Página 6 de 137

el cielo, sólo habría deseado ya, para colmar mi ventura, poder gozar de
todos estos bienes en el seno de esa patria afortunada, viviendo
apaciblemente en dulce sociedad con mis conciudadanos y ejerciendo con
ellos, a su ejemplo, la humanidad, la amistad y todas las demás virtudes,
para dejar tras mí el honroso recuerdo de un hombre de bien y de un
honesto y virtuoso patriota.
Si, menos afortunado o tardíamente discreto, me hubiera visto
reducido a terminar en otros climas una carrera lánguida y enfermiza,
lamentando vanamente el reposo y la paz de que me había privado una
imprudente juventud, hubiese al menos alimentado en mi alma esos mismos
sentimientos de los cuales no hubiera podido hacer uso en mi país, y,
poseído de un afecto tierno y desinteresado hacia mis lejanos
conciudadanos, les habría dirigido desde el fondo de mi corazón, poco más
o menos, el siguiente discurso:
«Queridos conciudadanos, o mejor, hermanos míos, puesto que así los
lazos de la sangre como las leyes nos unen a casi todos: Dulce es para mí
no poder pensar en vosotros sin pensar al mismo tiempo en todos los bienes
de que disfrutáis, y cuyo valor acaso ninguno de vosotros estima tanto
como yo que los he perdido. Cuanto más reflexiono sobre vuestro estado
político y civil, más difícil me parece que la naturaleza de las cosas
humanas pueda permitir la existencia de otro mejor. En todos los demás
gobiernos, cuando se trata de asegurar el mayor bien del Estado, todo se
limita siempre a proyectos abstractos o, cuando más, a meras
posibilidades; para vosotros, en cambio, vuestra felicidad ya está hecha:
no tenéis mas que disfrutarla, y para ser perfectamente felices no
necesitáis sino conformaros con serlo. Vuestra soberanía, conquistada o
recobrada con la punta de la espada y conservada durante dos siglos a
fuerza de valor y de prudencia, es por fin plena y universalmente
reconocida. Honrosos tratados fijan vuestros límites, aseguran vuestros

Página 6 de 137
 

Paginas:
Grupo de Paginas:         

Compartir:




Diccionario: