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Las expectativas positivas son determinantes para una personalidad saludable.
Y el número seis es enseñar a los niños a decir: Me gusta lo que soy, desde temprana edad. Enséñelos a decir: Me gusta lo que soy! Desde pequeños, me agrada mi persona, me caigo bien! Los niños con alto concepto de sí mismo, los niños con alta autoestima, tienen menos propensión a tener problemas en la escuela, aprenden mejor, son más populares, son bien aceptados por maestros y compañeros, tienen menos tendencia a caer en las drogas, tienen más resistencia a la presión negativa, no crean problemas, ni son rebeldes. Así que enseñe a sus hijos a decir: Me gusta mi persona! Me quiero a mí mismo! Me gusta como soy! Y pararse frente al espejo y repetir esas frases. Y actúan en concordancia con ello. La gente en la calle dirán: Es fantástico, estos niños no tiene miedo de nada. Será una gran satisfacción, después de haber tenido padres tan destructivos, queremos que nuestros hijos crezcan sin ningún miedo.
Muchos padres que han tomado el curso en este punto se sienten muy culpables e inquietos, se sienten tensos porque saben que han gritado a sus hijos, han criticado a sus hijos, los han herido y los niños han tenido problemas de personalidad, han tenido problemas en la escuela, con sus amigos han tenido baja autoestima o complejos de inferioridad, y los padres están tensos porque se dan cuenta de que les han hecho a sus hijos, lo que sus padres le hicieron a ellos y ahora ellos están cosechando justamente lo que sembraron antes, ven a sus hijos y se dan cuenta de lo que son sus hijos, es más resultado de lo que ellos les han hecho y dicho, que de cualquier otra razón. Ahora esta es la solución. Lo maravilloso es que es posible que Usted corrija el pasado con esta simple técnica. Al llegar a casa, lo primero que va a hacer, es reunir a todos sus hijos, los va a llamar, les va a pedir que se sienten y les va a pedir perdón, por todas sus críticas destructivas de antes.