Política (Aristóteles) Libros Clásicos

Página 281 de 299

que se les condena, pretextando que son facciosos y enemigos del poder;
porque sabe bien la tiranía que de las filas de las clases altas han de
salir las conspiraciones contra ella, urdidas por unos con el fin de
hacerse dueños del poder en provecho propio, y por otros para sustraerse a
la esclavitud que los oprime. Esto era lo que significaba el consejo de
Periandro a Trasíbulo; aquella nivelación de las espigas desiguales quería
decir que era preciso deshacerse de los ciudadanos eminentes.
Todo lo que acabo de decir prueba claramente que las causas de las
revoluciones deben ser, sobre poco más o menos, las mismas en las
monarquías que en las repúblicas. La injusticia, el miedo, el desprecio
han sido casi siempre causa de las conspiraciones de los súbditos contra
los monarcas. Sin embargo, la injusticia las ha causado con menos
frecuencia que el insulto, y algunas veces menos que las expoliaciones
individuales. El fin que se proponen los conspiradores en las repúblicas
es el mismo que en los Estados sometidos a un tirano o a un rey, y tienen
lugar las revoluciones porque el monarca está colmado de honores y de
riquezas que todos los demás envidian.
Las conspiraciones se dirigen ya contra la persona que ocupa el
poder, ya contra el poder mismo. El sentimiento producido por un insulto
arrastra sobre todo a las primeras, y como el insulto puede ser de muchos
géneros, el resentimiento a que da lugar puede tener otros tantos
caracteres diferentes. En los más de los casos la cólera, cuando conspira,
sólo piensa en la venganza, porque la cólera no es ambiciosa. De lo cual
es un testimonio la suerte de los Pisistrátidas: habían deshonrado a la
hermana de Harmodio; Harmodio conspiró para vengar a su hermana, y
Aristogitón para sostener a Harmodio. La conspiración tramada contra
Periandro, tirano de Ambracia, no tuvo otro origen que una chanza del
tirano, que en una orgía preguntó a uno de sus queridos si le había hecho

Página 281 de 299
 



Grupo de Paginas:               

Compartir:




Diccionario: