9.Pases, Envites y �rdago En cada uno de los lances del juego, los jugadores, por turno a partir del que es mano, pueden primero pasar o envidar, y luego, tras un envite, querer (aceptar el envite), reenvidar (envidar más) o no querer (rechazar el envite).
Si se dice envido, significa que se envidan 2 piedras al lance que corresponda. Los lances siguen un riguroso orden establecido grande, chica, pares y juego y no se suelen mencionar. Pueden envidarse otras cantidades indicando cuántas piedras se envidan.
Nunca debe decirse veo para aceptar un envite en el mus. Esta expresión del poker es muy mal recibida por los jugadores de mus. Para aceptar un envite en el mus hay que decir quiero o queremos. Sin embargo, si se desea reenvidar, puede decirse ¡y yo! o envido más, lo que significa que se sube el envite a 4 piedras, o a la cantidad que especÃficamente se exprese (envido ocho). Los envites y reenvites prosiguen hasta que las dos parejas igualan sus envites, es decir, hasta que la pareja retada quiere o renuncia.
Cuando la rueda de envites termina porque una pareja ha querido el envite o reenvite de la pareja contraria, la jugada no se resuelve hasta la finalización de los lances, momento en el cual todos los jugadores muestran las cartas.
Si los envites finalizan porque una de las parejas no acepta el envite o reenvite contrario, la pareja ganadora (aquella a la que no le han aceptado el último envite) se lleva 1 piedra si el envite era el primero, o tantas piedras como hubieran sido aceptadas en los envites anteriores. Por ejemplo: el primer jugador dice envido; si la otra pareja no acepta el envite se lleva una piedra; supóngase que el segundo jugador pasa y el cuarto dice ¡y cinco más!
El órdago se resuelve de inmediato, mientras que el envite, por muy grande que sea, se resuelve al final del juego parcial en su turno (y según sean las circunstancias del juego, puede suceder que los contrarios ya hayan ganado el juego por haber conseguido las pocas piedras que les faltaban en otro lance anterior, o porque ha habido un órdago posterior).
Los órdagos aceptados se resuelven de inmediato, sea el lance que sea.
La pareja que gane la jugada en la que se ha lanzado un órdago, gana directamente el juego. Por ejemplo, en un lance, uno de los jugadores exclama ¡órdago!, a lo que el otro bando puede contestar quiero (o queremos) aceptando el envite, o no quiero (o no queremos) rechazándolo.
En el primer caso, se muestran las cartas de inmediato y, el que tenga mejores cartas para la jugada, gana el juego; en el segundo caso, el jugador que ha lanzado el órdago se lleva una piedra porque no, o las que se hayan envidado anteriormente (si hubo antes otros envites).
Si en un lance o jugada los cuatro jugadores dicen paso, significa que no envidan y se pasa a la siguiente jugada. La pareja ganadora se llevará el premio mÃnimo establecido para la jugada pasada (1, 2 0 3 piedras). Cuando se repite en varias jugadas el paso de los cuatro jugadores, se dice que se está jugando al tran tran.
10.Verdades y Mentiras Hay que tener presente que la boca hace juego, lo cual significa que una vez anunciada una jugada (pase, envite, órdago, etc.) no es posible volverse atrás.
En el juego por parejas, el tanteo es común. Uno de los compañeros lleva la cuenta de las unidades ganadas (piedras), y el otro la de los amarracos (5 piedras).
El jugador que renuncia al envite de un jugador contrario pierde todo derecho al cobro de la jugada a la que corresponda, aun cuando al mostrar las cartas al final del juego se descubra que era mejor que la del contrario.
En cualquiera de las jugadas, ganan las cartas del compañero que las tenga mejores, aun cuando el que hubiera envidado o dado el órdago fuera el otro miembro de la pareja.
En general, en el cobro de las jugadas, el jugador que se olvidara de llevarse alguna piedra perderÃa el derecho a hacerlo una vez se hubiera cortado la baraja para el reparto del siguiente juego parcial.
Cuando faltan pocas piedras para alcanzar las necesarias para ganar el juego, hay que tener cuidado en el recuento de los tantos, ya que los lances se cobran por orden y si una de las parejas consigue el total de las piedras antes de terminar el recuento del juego parcial, se proclama ganadora del juego, aunque la pareja contraria le ganara los siguientes lances y con ello totalizara mas piedras que la primera. Por ejemplo, si una de las parejas está a falta de 2 piedras para terminar y gana un envite a la grande, ya no hace falta seguir contando los restantes lances, aunque la otra pareja ganase la chica, los pares y el juego.
Grande y chica. Si todos los jugadores pasan, sin que nadie envide, el jugador que mejor jugada tenga a la grande se llevará 1 piedra al final del juego parcial. Del mismo modo, el jugador que tenga la mejor jugada a la chica se llevará otra piedra. En el caso de que un jugador envide a una de estas jugadas y nadie acepte su envite, se llevará en el acto una piedra en concepto de deje o no aceptación de envite, quedando de este modo cobrada la jugada.
Pares y juego sÃ. Si todos los jugadores pasan a estas jugadas sin que nadie envide, al final del juego parcial el jugador que mejor jugada tenga de cada una de ellas se llevará el valor de la misma. Asimismo habrá que añadir las piedras que por estas jugadas le puedan corresponder a su compañero de juego.