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Número cuatro: No olvide que los niños necesitan un flujo continuo de amor y aprobación. El amor y la aprobación es la línea vital emocional y psicológica que necesitan los niños para crecer. Imagine que sus hijos tienen una línea intravenosa y esa línea tiene los nutrientes vitales para el desarrollo de su personalidad; los nutrientes vitales de esa línea intravenosa son las palabras y actitudes de amor y aprobación, el flujo continuo, y si Usted corta el flujo es como cortar el flujo de nutrientes o cortar el flujo emocional del cerebro emocional. Lo necesitan en el día y en la noche, en la mañana y en la tarde, continuamente, igual que en el crecimiento necesitan mucho alimento, comen mucho para crecer, también necesitan mucho apoyo emocional.
Número cinco: Los niños necesitan el elogio. Cuando se hace un elogio a un niño su sistema fisiológico empieza a vibrar y se llena de energía, necesitan aliento; recuerden que los niños sienten miedo, porque son pequeños, en un mundo de grandes, siempre necesitan alientos: Tú puedes, yo se que puedes! Adelante! Inténtalo! También necesitan refuerzo. A veces algo le sale mal, a veces lo logran y hay que decirle: Oye, lo hiciste muy bien! Hay que reforzar sus logros. Necesitan paciencia, un niño requiere mucha paciencia, porque su aprendizaje puede ser lento. El mejor regalo para sus hijos es tenerles paciencia. Darles apoyo. También uno debe ser amoroso y también ser amable. Los niños necesitan mucha dulzura y un trato amable. Necesitan ternura, necesitan delicadeza, especialmente necesitan paciencia cuando menos desea uno tenerla, cuando son más exasperantes necesitan la mayor paciencia de Usted, la mayor dulzura, la mayor comprensión, la mayor compasión.
Y número seis: Es decir a sus hijos todos los días que los ama. Todos los días dígales que los ama. Cuántos padres no les dicen a sus hijos que los aman. Dicen, bueno, ellos saben que los amo! Hay muchos que dice: Ya lo saben, ellos saben, no tengo que decirlo! Pero si necesitan oírlo. Y no lo decimos porque nuestros padres nunca nos dijeron que nos amaban.