El color surgido del espacio (Howard Phillips Lovecraft) Libros Clásicos

Página 24 de 38

él. Ahora debía ocuparse de Nahum; éste tenía que ser alimentado y atendido, y
trasladado a algún lugar donde pudieran cuidarle.
Cuando empezaba a bajar la oscura escalera, Ammi oyó un estrépito debajo de él.
Incluso le pareció haber oído un grito, y recordó nerviosamente la corriente de
vapor que le había rozado mientras se hallaba en la habitación del ático.
Oprimido por un vago temor, oyó más ruidos debajo suyo. Indudablemente estaban
arrastrando algo pesado, y al mismo tiempo se oía un sonido todavía más
desagradable, como el que produciría una fuerte succión. Sintiendo aumentar su
terror, pensó en lo que había visto en el ático. ¡Santo cielo! ¿En qué
fantástico mundo de pesadilla había penetrado? No se atrevió a avanzar ni a
retroceder, y permaneció inmóvil, temblando, en la negra curva del rellano de la
escalera. Cada detalle de la escena estallaba de nuevo en su cerebro.
De repente se oyó un frenético relincho proferido por el caballo de Ammi,
seguido inmediatamente por un ruido de cascos que hablaba de una precipitada
fuga. Al cabo de un instante, caballo y calesa estaban fuera del alcance del
oído, dejando al asustado Ammi, inmóvil en la oscura escalera, la tarea de
conjeturar qué podía haberles impulsado a desaparecer tan repentinamente. Pero
aquello no fue todo. Se produjo otro ruido fuera de la casa. Una especie de
chapoteo en el agua..., debió de haber sido en el pozo. Ammi había dejado a Hero
desatado cerca del pozo, y algún animalito debió meterse entre sus patas,
asustándolo, y dejándose caer después en el pozo. Y la casa seguía brillando con
una pálida fosforescencia. ¡Dios mío! ¡Qué antigua era la casa! La mayor parte
de ella edificada antes de 1670, y el tejado holandés más tarde de 1730.
En aquel momento se oyó el ruido de algo que se arrastraba por el suelo de la
planta baja, y Ammi aferró con fuerza el palo que había cogido en el ático sin

Página 24 de 38
 

Paginas:


Compartir:




Diccionario: